La primera vez que oí hablar de la cueva de Bolimini, fué gracias al libro Oficiales de carrasca (totalmente recomendable) de Pedro Luis Bellés, un escritor nacido en Benassal, y que nos contaba la historia de los últimos carlistas en las tierras de Villafranca, Morella, Benassal etc. En uno de los capítulos del libro hace mención a la cueva, en referencia a que los habitantes de Vilafamés se refugiaban en ella cuando el pueblo era bombardeado durante la Guerra Civil Española. He tenido la ocasión de hablar varias veces con él y preguntarle sobre la cueva, pero a la información que me ha dado, yo ya tenía acceso. Me llamaron la atención dos cosas: la primera el nombre de Bolimini, y la segunda
que una cueva hiciera las veces de refugio antiaéreo.